Preparados siempre debemos estar, porque no tarda en cumplirse lo que nos ha prometido, por la palabra.
Porque nuestro Dios, ve y oye, siempre lo que hacemos. Y de los demás podemos escondernos, mas no del Padre.
Porque solo Dios nos juzgara en su momento. Y entonces, ¿estamos preparados para rendirle cuentas?
No existe nada más hermoso que Amar.
Amar, lo que se hace, lo que se tiene, lo que por derecho tenemos, que es lo que Dios nos ha dado.
Amando seremos libres. Libres de la maldad, de la envidia, del odio, de la enfermedad, y muchos otros males.
Dios nos hizo libres. No nos encadenemos pues nosotros mismos en jaulas fabricadas por maldades.
Somos especiales. Amemos como el nos manda. Los mandamientos los resumió en dos: “Amar a Dios sobre todas las cosas, y a tu prójimo como a ti mismo. “
Dios es primero sobre todo. Amate a ti como hijo de Dios, y amaras a los demás como si fueras tú.
En este Año Nuevo, esta es mi gran resolución: Sembrar la semilla de Amor en todo lo que haga y a todos mis semejantes.
Muchas Bendiciones a todos.
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